Vivimos en un Universo plagado de algoritmos naturales. Por ejemplo cuando el agua ha cambiado de estado líquido a sólido, es porque ha sucedido una secuencia natural de instrucciones que en base a condiciones iniciales de la temperatura del agua y del ambiente que la rodea ésta se congelará si la temperatura alcanza cero grados centígrados y se mantiene ahí o abajo de ahí.

Los planetas de nuestro sistema solar se encuentran girando alrededor del sol porque previamente a que llegaran a este estado de equilibrio, la materia que ahora compone al sol y a los planetas siguió la secuencia de instrucciones integradas en el comportamiento de las fuerzas nucleares y de la gravedad.

El funcionamiento de un cuerpo humano opera basado en un gran número de algoritmos como el que nos mantiene respirando, los que mantienen a nuestro corazón palpitando y aquellos que se disparan cuando tocamos algo muy caliente.

Verdaderos genios ha descubierto los algoritmos del Universo que incluyen a lo que llamamos Naturaleza, entre ellos se encuentran Galileo, Newton, Einstein, Maxwell, Bohr, Curie ... La lista de genios es grande pero no lo suficiente. El planeta Tierra, necesita urgentemente más genios en todas las áreas del conocimiento humano. Necesitamos gente que piense a niveles extraordinarios para resolver los inmensos problemas de la humanidad y de una vez por todas mejorar el nivel de vida de la mayoría de la población humana y esto conservando y habilitando los ambientes naturales. No podemos seguir utilizando algoritmos sociales creados para resolver problemas de siglos anteriores. Por ejemplo, los algoritmos que todavía se utilizan para educar a los niños y jóvenes, me refiero, a los sistemas educativos diseñados para la era industrial, son obsoletos y lo han sido por los pasados veinte años o más.

Seguro hay mucho más algoritmos del Universo por descubrir que los que me puedo imaginar pero si algo podemos aprender de los que ya se han descubierto es que el potencial del cerebro humano es inmenso y que debemos cultivar el mayor número posible de ellos para cosechar en el futuro el fruto de sus ideas y descubrimientos.